'Él es mi perrihijo': las mascotas que disfrutan de una vida llena de mimos

Lun, 08/05/2019 - 11:03
Hay dueños que le dan a sus animales todos los lujos, como si fueran su descendencia. Para algunos, tantas atenciones son excesivas
Thor en su cumpleaños. Foto: Cortesía

Thor en su cumpleaños. Foto: Cortesía

Thor es un bulldog francés que el 1 de junio cumplió dos años. El pequeño es la adoración de Anais Nieto y su esposo, César Quezada.

Su nombre fue escogido en honor al personaje de Marvel Comics, por el fanatismo de César hacia la compañía creadora de superhéroes.

El perrito llegó a sus vidas cuando apenas tenía dos meses y medio para hacerle compañía a Anais, ante las salidas de su esposo del país por la naturaleza de su trabajo.

Desde ese entonces, el animal se ha convertido en el hijo de la joven pareja y será, en un futuro, (tal y como lo afirma Anais) el hermano mayor de su primogénito.

Thor es un consentido. No duerme con sus dueños en la cama, pero, sí en la misma habitación.

De hecho, cuando era un cachorro, sus dueños se levantaban constantemente durante la madrugada para que el can hiciera sus necesidades. Un panorama digno de padres primerizos.

Thor tiene una dieta orgánica llamada "BARF" (por sus siglas en inglés) que en español se entiende como Alimentación Cruda Biológicamente Apropiada. El animal no se alimenta de las tradicionales "bolitas" o comidas para perros, sino de frutas, vegetales, carnes crudas y blandas.

Si cuida su dieta, tiene que cuidar su aspecto. Thor siempre está a la moda. Su dueña suele colocarle atuendos, generalmente bandanas o corbatas estilo "gatito", procurando que Thor mantenga sus movimientos naturales.

 Thor es la viva definición de los llamados "perrihijos", aquellas mascotas de cuatro patas que incluso disfrutan de su cumpleaños, entre otros lujos.

El amor por su mascota, para personas como los dueños de Thor, no tiene límites, sin embargo, hay quienes suelen verlo como un comportamiento exagerado hacia un animal.

El veterinario José Torres explica que la convivencia con las mascotas no afecta, siempre y cuando se cumplan con las medidas de higiene, salud y con la visita periódica al veterinario.

"Lo que pasa es que la mayoría de las personas tienen a las mascotas como un artículo, las ponen allí y no las atienden, ni siquiera en cuanto a la comida”, explica Torres.

La psicóloga Lizmaineth Hernández resalta que "una mascota es sin dudas un ser que da contención a una persona más allá de lo que se imagina".

Una mascota siempre será un buen "contenedor" por el solo hecho de que no habla, no te puede criticar, ajusticiar o señalar y siempre está allí en la espera de tu contención, o sea, un sentimiento recíproco, siempre necesita de ti.

Hernández menciona que no se puede enfocar el hecho de ser tan apegado a la mascota a una situación psicológica que demande algo negativo o contraproducente en un ser humano, si la persona considera llamarle como "perrihijo".

Es simplemente la naturaleza del ser humano de dar cariño a un ser vivo y mucho más aún a un ser totalmente dependiente de uno, porque al no poder hablar y no ser humano, no se desarrolla con capacidades de ser autónomo, sino que siempre necesitará de nosotros como persona.

Eso lo sabe bien Anais, quien afirma que desde que está con Thor ha bajado su nivel de ansiedad, él la mira "con esos ojitos negros" cada vez que ella le habla, tal como si entendiera lo que le está diciendo.

En los niños, según Hernández, las mascotas permiten trabajar el grado de la responsabilidad, ya que le enseña a ser responsable con un ser que es totalmente dependiente de él.

"Esa es una de las cosas que también es beneficiosa para cuando se considera tener una mascota en un hogar donde hay niños", acota la especialista.  

La moda y la mascota

En cuanto a quienes visten a las mascotas, Torres menciona que por el clima de Panamá, es preferible no vestirlas si van a salir, pero si están en la casa, vale.

"Son animalitos que se educan, hay algunos que se acostumbran al punto de que si no los visten se deprimen; lo mismo sucede con aquellos que no están acostumbrados a que les corten el pelo, porque a veces los pelan y el animalito se arrincona, porque siente que está desnudo”.

Igual sucede con las comidas, "si ellos ven que el dueño hace su fiesta y come dulces, él también quiere dulce".

Hernández resalta que los beneficios de las mascotas son muchos y comprobados científicamente, por eso existen las mascotas de compañía certificadas como tal para tratar y sobrellevar diagnósticos difíciles de manejar.

De hecho, la especialista ha certificado a mascotas de compañía para viajes a personas que tienen diagnósticos de ansiedad generalizada de situaciones postraumas, que en ciertos casos generan factores de estrés elevado y que se canalizan a través de una mascota. 

Muchas veces la persona no necesita medicación, porque se siente cómoda con su mascota de compañía.

 

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