La niñera perfecta

Nanas, niñeras, “nanny” o cuidadoras, son diferentes los nombres que reciben aquellas mujeres a quienes se les confía los pequeños de la casa. Mujeres imprescindibles en el hogar de hoy, donde la madre trabaja, pero tan difíciles de encontrar.

 

“El servicio doméstico ya no es el mismo de antes”, dicen las abuelas, y solo hay que conversar con otras mamás en un parque por la tarde para enterarse de las historias que tiene cada una sobre sus experiencias con nanas. Aún así, ante la necesidad, la búsqueda por encontrar a la persona adecuada continúa, por lo que la psicóloga Maire Peyronnet aconseja a los padres que identifiquen lo que buscan en ella. Valores, métodos, personalidad. “Una nana puede ser el apoyo de una familia, la cuidadora del hijo o hija, pero nunca debe ser vista como la madre sustituta o la figura de crianza del niño. Los padres deben mantener comunicación abierta con la nana y con los hijos para estar al tanto de cualquier incidente”, añade la especialista. La organización Kids Health recomienda que al momento de contratar a una persona para el cuidado de los niños, los padres deben conocer y diferenciar las necesidades de sus hijos: su temperamento, estado de salud, intereses y comportamiento, ya que si por ejemplo es un bebé de menos de un año, sus necesidades serán las básicas: cuidado, afecto y atención. Pero si por lo contrario, es mayor, las necesidades serán más específicas: desarrollo del juego, del aprendizaje, la interacción con otros niños y la curiosidad intelectual.

 

 

Ya sea que la niñera esté referida por una empresa de colocación de personal o contactada directamente, el conversar con ella personalmente y estar atento a sus expresiones o lenguaje físico serán factores claves para la contratación.

 

La Asociación Internacional de Niñeras recomienda realizar entrevistas a las posibles candidatas por lo menos en dos ocasiones y pedir una comprobación de sus antecedentes delictivos. Algunas de las preguntas claves son: ¿Por qué le interesa trabajar con niños? ¿Por qué dejó su último trabajo? Por otra parte, las referencias suministradas deben ser comprobadas. Lo mejor que se puede hacer es preguntar a la familia anterior por qué concluyó la relación con la niñera y si se la recomienda o no. Para saber cómo la persona maneja el tema de la disciplina, sobre todo en los niños con más edad, se pueden realizar preguntas como ¿cuál es su política en lo que se refiere a disciplina? Y plantearle situaciones del tipo “qué pasa si…”, como por ejemplo: qué pasa si el niño(a) no quiere recoger sus juguetes o si se pelea con los hermanos.

 

El dejar los hijos al cuidado de una persona ajena a la familia es sin duda un tema que no deja de preocupar, ya que implica muchos factores, que no solamente son comida, baño o la hora de la siesta. Se trata de criar y formar a un pequeño y de ser una figura de orden, mientras la madre o el padre están fuera. Kids Health exhorta a que los padres aprovechen al máximo el tiempo con sus pequeños una vez hayan llegado del trabajo.

 

 

El sitio web Baby center tiene una guía para estar anuente ante cualquier cambio o situación extraña de parte de la nana.

1- Te das cuenta que la niñera te ha mentido o robado. No se debe tolerar a ninguna persona que robe, mienta o te engañe. La persona que contrates para cuidar de tu hijo tiene que merecer tu confianza para que pueda existir una buena relación.

2-Tu niñera no te da detalles sobre lo que hizo durante el tiempo que pasó con tu hijo. Si la niñera no te da explicaciones claras es porque tiene ciertos problemas para comunicarse contigo o porque tiene algo que esconder.

3- Tu hijo ha sufrido demasiados accidentes fáciles de evitar. Una niñera debe vigilar a tu hijo constantemente, lo cual significa que tiene que saber dónde está y qué está haciendo en todo momento, para evitar que se lastime.

4- Encuentras a tu hijo con un aspecto sucio y descuidado. Esto significa que la niñera de tu pequeño no puede hacerse cargo de las cuestiones más básicas.

5- El niño se vuelve taciturno, se aísla o tiene problemas para comer o dormir.

6- Se altera súbitamente en cuanto llega la cuidadora