La dieta anti-inflamatoria

Lun, 09/26/2016 - 10:09
Esta puede llegar a ser la solución nutricional a ciertas dolencias corporales que puedes llegar a desarrollar.

De dietas se habla mucho, nunca se había teorizado tanto acerca de la comida y de la dieta nutricional que llevamos en el día a día, pero la mayoría coincide en un solo objetivo: bajar de peso. A diferencia de este, hoy hablaremos acerca de otro tipo de régimen que pretende darnos una vida más saludable. Tampoco se trata de un plan de alimentación por un tiempo determinado, sino más bien de una propuesta nutricional que perdure en el tiempo y tenga como resultado un buen estado de salud.

Con la dieta antiinflamatoria se trata de controlar el tipo y la cantidad de grasa de la dieta y en administrar las plantas y alimentos con propiedades antiinflamatorias. 

¿Por qué antiinflamatorias? Pues distintos expertos concuerdan en que muchas enfermedades y males del cuerpo tales como artitris, asma, alergias, bronquitis, dolores menstruales, lupus, Síndrome del Tunel Carpiano, tendinitis y úlceras digestivas se deben a una causa subyacente: la inflamación.

Para combatir esa inflamación, nuestro cuerpo produce sustancias antiinflamatorias a partir de los ácidos grasos esenciales. Este tipo de grasa debe ser aportada por la dieta.

Veamos algunos de los puntos claves de este régimen.

1. Las grasas son el punto clave de esta dieta: Karen Lamphere, reconocida nutricionista en Washington, Estados Unidos, recomienda alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 como el salmón salvaje, las sardinas, el arenque, las anchoas, la linaza, las semillas de cáñamo y las nueces. Además, otras grasas antiinflamatorias podemos encontrarlas en el aceite de oliva virgen extra, el aceite de aguacate, el aceite de linaza, el aceite de semillas de cáñamo y el aceite de nuez.

2. Frutas y verduras: Juegan un importante papel, son ricas en antioxidantes que reducen la inflamación. “Las frutas y verduras con alto contenido en antioxidantes son importantes, especialmente las cebollas, el ajo, los pimientos y las verduras de hojas verdes”, dice Lamphere. Y añade: “Son ricas en carotenoides para la lucha contra la inflamación, en vitamina K y vitamina E.”

3. Las hierbas y especias: Lamphere explica: “La cúrcuma, el orégano, el romero, el jengibre y el té verde contienen polifenoles y bioflavonoides que reducen la inflamación y limitan la producción de radicales libres”. Otra especie importante para esta función es la pimienta. Esta especia contiene capsaicina, que es un potente inhibidor de la sustancia P, un neuropéptido asociado con procesos inflamatorios.

4. Proteínas: En este aspecto, debemos tener mucho más cuidado. Las proteínas que se escogen deben tener cierto perfil. Lamphere dice que “hay una diferencia en el contenido de grasas saturadas y ácidos grasos omega-3 en el contenido de la carne de ganado alimentado con grano versus la carne de una res alimentada con pasto, siendo esta última la opción más saludable para una dieta antiinflamación”. Y añade: “Además, los huevos ecológicos pasteurizados tienen un mejor perfil de ácidos grasos antiinflamatorios que los huevos de granjas industriales”.

Después de conocer estos puntos fundamentales  del régimen te estarás preguntando cuáles son los alimentos que son pro- inflamatorios. Pues muchos, las grasas no saludables son uno de los primeros. 

Karen Lamphere explica que nuestra dieta occidental está llena de alimentos procesados y comidas rápidas, que contienen grandes cantidades de ácido omega 6, entonces, lo que ocurre es un desbalance de ácidos grasos, ya que deberíamos consumir más omega 3. 

Los alimentos que tienen omega 6 son el maíz, la soya, el maní y el aceite de girasol. “Se metabolizan en compuestos similares a las hormonas que en realidad promueven la inflamación”, dice Lamphere.

Otro grupo de grasas malas son las grasas trans, son altamente inflamatorias y se encuentran en los alimentos procesados o comida rápida, y especialmente en lo frito. Hay que tratar de reducir el consumo de este tipo de alimentos.

  • Compartir: