Depresión postparto, cómo identificar y afrontar a tiempo

Lun, 06/06/2022 - 09:44
El nacimiento de un bebé supone numerosos cambios a nivel físico y psicológico y puede llevar a que algunas madres sufran depresión postparto y lo hagan en silencio por miedo a ser juzgadas.

Aunque la maternidad puede ser un momento de mucha felicidad y entusiasmo para la familia, el cambio radical que sufre la madre, especialmente la primeriza, suele ir acompañado de muchas emociones fuertes que pueden desencadenar en una depresión postparto.

 

Las madres tienen que dedicar todo su tiempo a cuidar al bebé y muchas veces descuidan sus propios cuidados y bienestar como dormir bien o comer saludablemente.

 

Este nuevo momento suele caracterizarse por ser un cúmulo de sensaciones positivas y negativas al mismo tiempo que suelen estar invisibilizados, según la plataforma de psicólogos TherapyChat que elaboró una guía con consejos para pedir ayuda y afrontar esta etapa.

 

 

La dualidad que existe entre las emociones que la sociedad plantea que deberían sentir y las que muchas de ellas experimentan realmente, genera una presión externa.

 

Por ello, se puede incrementar el sentimiento de responsabilidad que siente una madre a la hora de cuidar a su hijo. Y de esta manera, se concibe como egoísta e irresponsable cualquier pensamiento que no lleve asociado dedicarse en cuerpo y alma a él.

 

La combinación de estos factores psicológicos y sociales, junto a otros genéticos y hormonales por la reducción de progesterona y estrógenos tras dar a luz, puede originar la depresión postparto.

 

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Principales síntomas de la depresión postparto

Un aspecto importante a tener en cuenta es que no siempre la mujer estará decaída o con una conducta introvertida. Los síntomas visibles pueden ser variados dependiendo de la mujer.

 

No obstante, existen algunas características habituales en los episodios de depresión que ayudarán a detectar este problema como son:

  • Dificultad para relacionarse con el bebé: encontrar dificultad para crear un vínculo con él u obsesionarse por el cuidado
  • Irritabilidad: muchas mujeres expresan enfado ante situaciones de mucho estrés. Es habitual que muchas madres se vean sobrepasadas por los cuidados del bebé y se muestren irritables ante su familia, amigos o su hijo
  • Ansiedad: cuando el estrés aumenta progresivamente puede convertirse en ansiedad. En ocasiones, esta puede estar derivada por la impotencia de muchas madres por no encontrarse a pleno rendimiento o felices por esta etapa
  • Insomnio: el cansancio y la falta de descanso son una combinación que pueden afectar gravemente en el descanso que necesitan las madres en las primeras semanas postparto
  • Cambios en el apetito: este puede aumentar o reducirse considerablemente
  • Tristeza: muchas madres pueden encontrarse tristes o frustradas por no poder disfrutar como les gustaría. El llanto suele ser común pero también podemos observar otras formas de expresar tristeza, por ejemplo, camuflándose con otra emoción como el enfado.

 

Aprender a pedir ayuda

El miedo a ser juzgadas y la presión social a la hora de reconocer cómo se sienten, hace que muchas mujeres tengan miedo a expresarse. En determinados casos, algunas madres pueden tener sentimientos de culpabilidad al no sentirse comprendidas por su alrededor.

 

 

Esto puede empeorar la sensación de soledad y convertirlas en más vulnerables. Por ello, pueden tardar mucho más tiempo en pedir ayuda o que no lo hagan en ningún momento.

 

Los psicólogos de TherapyChat elaboraron unos consejos para aprender a pedir ayuda contra este trastorno:

  1. Fomentar la comunicación: se deben abrir canales de comunicación con las madres. De esta forma, ella podrá expresar sus sentimientos si en algún momento se encuentra preocupada o estresada
  2. Fomentar el autocuidado de la mujer: hay que promover el autocuidado y poner en valor el tiempo dedicado a ella misma. Si damos espacio y lugar al mismo, validaremos y transmitiremos el mensaje de que no la juzgamos
  3. Conversaciones introspectivas: hay que mantener una comunicación enfocada a que la madre mire dentro de sí misma y valore sus propios sentimientos ante la maternidad. Ella puede valorar qué piensa sobre sus miedos, dudas, dificultades y emociones que trae esta nueva etapa
  4. Ver más allá de una madre: muchas mujeres se olvidan de que aunque hayan tenido un hijo siguen siendo, mujeres. No monopolizar las conversaciones en torno al nacimiento del hijo y tratar con normalidad otros aspectos como la relación de pareja es importante

 

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