Seguramente habrás escuchado hablar del Síndrome del Intestino Irritable. Está definido, según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), como un trastorno intestinal funcional, esto quiere decir que sus síntomas se producen sin que haya un daño o lesión.
Los expertos en medicina aseguran que los síntomas de este síndrome están causados por varios factores como la obesidad, el tabaco, el abuso de alcohol, una dieta inapropiada, el consumo de mucha comida rápida o el estrés. Y hay médicos que hacen especial énfasis en esta última causa, el estrés. En muchos pacientes, el SII —también conocido antiguamente como Síndrome de Colón Irritable— se da por problemas de índole emocional, como estrés, depresión, o ataques de pánico.
De lo que sí podemos estar seguros es de los síntomas. Las personas que padecen este síndrome por lo general presentan dolores muy fuertes abdominales, gases, una sensación continua de llenura y distensión. Además, pueden experimentar estreñimiento o diarrea o irregularidades en su flujo de deposiciones, estas últimas dos pueden alternarse.
Este síndrome puede ser un padecimiento de por vida, así que es importante conocer cuáles son los pasos adecuados a seguir y el tratamiento ideal. Lo primero es estar dispuesto a realizar cambios en el estilo de vida (a continuación te daremos una lista).
Los medicamentos en este caso son algo delicados, porque no a todos les funcionan. Algunos de los que el médico puede sugerir son: medicamentos anticolinérgicos una hora antes de comer, loperamida para la diarrea, antibióticos, entre otros.
Consejos para causantes físicas
- Debes comenzar por comer despacio y masticar bien todos los alimentos. Esto permitirá que le caigan menos pesados a tu estómago, tendrás una buena digestión y se absorberán mejor tus nutrientes.
- Aumenta tu consumo regular de agua, sobre todo si predomina el estreñimiento.
- Es importante que establezcas un horario fijo para tus comidas.
- Puedes realizar ejercicio aeróbico con movimientos abdominales, esto te puede ayudar a controlar tus dolores. Puedes probar con la bicicleta, el gimnasio o al aire libre.
- Un truco que muchos utilizan es masajear la parte abdominal en el sentido de las agujas del reloj, o también aplicar bolsas térmicas con calor.
Consejos para causas emocionales
La IFFGD (International Foundation for Functional Gastrointestinal Disorders), brinda algunos tips en cuanto a este tema. ¡Apunta!
- Aprende a conocer tus emociones y respuestas corporales ante el estrés.
- Evita, lo más que puedas, aquellas situaciones que te causan ansiedad y angustia.
- Es necesario que aprendas técnicas de relajación, respiración o de meditación. De esta manera podrás reducir las respuestas negativas de tu intestino a situaciones poco favorables para él.
- Debes realizar ejercicio o alguna actividad que te permita liberar endorfinas. Debes igualmente consultar con tu médico porque en algunos casos el ejercicio excesivo no ayuda, prefiere aquellos aeróbicos, o que requieran menor fuerza corporal.
- Pídele a tu gastroenterólogo que te ayude a encontrar un psicólogo recomendado para poder manejar mejor tu parte emocional.
- Asistir a un grupo de ayuda también puede contribuir a que te sientas respaldada y segura de ti misma.
Alimentos a los cuales debes decir adiós
Esto es vital. Necesitas poner cuidado a la dieta que vas a establecer en tu rutina diaria. Te damos algunos sí y no de los alimentos que puedes incluir.
Si estás con estreñimiento...
“Los sí”: Puedes consumir fibras, es decir, alimentos como frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, semillas, entre otros. Además deberás aumentar el líquido y alimentos que tengan prebióticos y probióticos como la alcachofa, esto ayudará a activar la flora intestinal.
“Los no”: evita los alimentos fritos, escoge aquellos alimentos que estén preparados a la plancha y al vapor. Además, deberás eliminar algunos alimentos fribrosos como col, coliflor, habas, garbanzos, lentejas, cebollas, puerros, guisantes, melón, los embutidos, el café, pescados grasos, frutos secos y en conserva, tienden a producir gases en mayor proporción.
Si estás con diarrea...
“Los no”: principalmente hay que evitar los lácteos como leche, queso, yogurt, helados y mantequilla, también los condimentos, el alcohol, sopas de sobres y el chocolate.