El embarazo modifica el cerebro de las embarazadas

Mar, 12/20/2016 - 16:02
Una investigación realizada por un grupo de científicos de la Universidad de Leiden y Barcelona, mostró que la estructura de los cerebros de las mujeres, cambia notablemente durante sus primeros embarazos y que estas modificaciones se prolongan al menos por 2 años.

¿Qué descubrieron?

Particularmente se registra una contracción de la materia gris en regiones asociadas al procesamiento y generación de respuestas. Esto puede significar que los cerebros de las nuevas madres están conectados de manera más efectiva en áreas que les permiten, por ejemplo, responder eficientemente a las necesidades de su bebé o detectar situaciones amenazantes en su entorno. El grupo de científicos ​​registró imágenes de resonancia magnética, para examinar los cerebros de 25 mujeres que nunca habían tenido hijos, tanto antes de quedar embarazadas, como después de haber concebido.

 

"Cambios cerebrales que preparan a la mujer para la maternidad, mejorando la empatía madre-hijo. Estos cambios están asociados al vínculo maternal", explicó Susanna Carmona, coautora del estudio que comenzó como investigadora postdoctoral de la Universidad Autónoma de Barcelona y actualmente es investigadora del Hospital Gregorio Marañón, de la Universidad Carlos III y adscrita al Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (Cibersam).

 

Parte de esas regiones se activan cuando la mujer observa la imagen de su bebé, según el estudio, que publica Nature Neuroscience. Popularmente se dice que las mujeres experimentan una especie de enamoramiento de sus retoños, pero es más que eso, se trata de necesidad evolutiva, según indica Carmona. "Normalmente en el instinto de supervivencia el individuo se antepone a la especie, pero cuando tienes un hijo el bebé es lo primero, antes que tu propia persona. Para la evolución humana es muy importante no sólo huir del peligro -el instinto de supervivencia-, sino asegurarte de que tu hijo va a ser capaz de transmitir tus genes", argumentó la investigadora.

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