Peligrosa belleza

 

"Hay que ir a la vertiente no tóxica", aseguró Cristina Núñez, directora del centro de preparación al parto y posparto Más Natural. Inclínate por productos naturales y orgánicos, definitivamente no  podrás usar  spray de cabello, cremas anticelulitis o tintes con amoníaco. Está permitido el uso de aquellas tinturas exentas de amoníaco y luego del periodo de organogénesis (formación del bebé), es decir, posterior a  la semana 12 de embarazo.

 

No está permitido, porque el formol es tóxico y si bien, teóricamente, no llega al cuero cabelludo, la inhalación de sus vapores o cualquier accidente por derrame serían riesgosos para el bebé.

 

El embarazo  puede provocar la aparición del cloasma, que son  manchas oscuras en el rostro provocadas por los cambios hormonales. La protección solar debe ser muy alta e imprescindible. CUIDADO: baños calientesSi bien son recomendados para relajarte, es preferible que los tomes después del primer trimestre porque en este tiempo es  cuando mayor es el riesgo de abortos. Olvídate de los saunas.

 

Si practicabas ejercicio antes de quedar embarazada, entonces no tienes por qué dejar de hacerlo. Salvo que tengas alguna patología y tu médico te recomiende lo contrario. Eso sí, de manera moderada. "Tu cuerpo te va a ir diciendo cuándo parar y cuándo continuar. Una vez más, el sentido común nos indicará qué hacer. ¿Correr embarazada? Por supuesto, pero a partir del quinto mes el sentido común y tu propia comodidad te indicará que no puedes continuar", confirma Cristina Núñez.  

 

El cirujano plástico Rubén García Guilarte reconoce que sí se pueden hacer intervenciones en embarazo, pero confirmó: "No es recomendable. A priori, a partir del tercer mes la posible afectación fetal es mucho más complicada, pero el embarazo conlleva generalmente cambios corporales que hacen que la situación no sea estable y, por tanto, no adecuada". En cuanto a las cirugías plásticas, es mejor esperar a tener el bebé. Uno de los grandes mitos de  una mamá con implantes es que no puede dar pecho, esto es falso.

 

Diles adiós a la depilación láser, peelings, rejuvenecimientos, etc. 

 

La embarazada puede recibir masajes —sobre todo antiestrés, en el cuello o los hombros, las piernas, la cabeza y los pies— pero no masajes reductores, ya que los componentes de las cremas que se utilizan para tal fin están contraindicados en la gestación. 

 

Están contraindicadas, tienen en general derivados del retinol y del ácido salicílico, ambas sustancias riesgosas para el bebé.