Es fácil dejarse llevar por la rutina cuando nos vestimos para ir a trabajar. Cuando encontramos un estilo que es cómodo, y de poco mantenimiento, nos encasillamos en siempre vestir así. Yo también soy así, desde que empecé a vestir de negro, nunca pude decirle adiós. Mi solución es agregar accesorios. Al agregar accesorios, siento que todos los días llevo un atuendo muy diferente, aun que la base sea bastante parecida.
Por ejemplo, los pantalones que llevo, son de lo mas cómodo que hay, y ni hablar de la camisa. Pero al agregar una cartera blanca y tacones con pedrería dorada, este outfit pasa de verse muy sport a verse mas profesional y perfecto para ir a trabajar.
Credito de fotos: @gonxbarrios