- Cultura
Durante tres días y con más de 90 niños participantes, la comunidad de Las Palmitas, en el sector de Las Colinas de Santa Marta, tuvo la oportunidad de plasmar con pintura sus emociones y sentimientos sobre el muro que fue reconstruido luego de que fuera vandalizado.
Niños, jóvenes y adultos de la comunidad de Las Palmitas, en el sector de Las Colinas de Santa Marta, dejaran su huella en el mural sobre una gran pared que fue reconstruida luego de que fuera vandalizada. La construcción tiene como fin salvaguardar y brindar seguridad a los usuarios del corredor y a la comunidad cercana, principalmente a los niños que podían verse afectados al intentar cruzar por este punto del Corredor Norte.
Durante tres días, más de 200 personas, entre ellos cerca de 90 niños de los alrededores, acompañados de sus padres, abuelos y voluntarios tomaron pinceles y hasta con sus propias manos le dieron color a una parte del muro que hoy representa su fortaleza y libertad. Le dieron vida al "Águila Harpía", ave nacional de Panamá. El mural representa la seguridad y el espíritu de atención y vigilia constante.
El mural también tiene plasamada la palabra "Panamá" y dentro de las letras se anotaron los sentimientos y emociones que inspiraron a los jóvenes pintores de la comunidad.
El proyecto, desarrollado por la Empresa Nacional de Autopista, ENA, contó con el apoyo de la Fundación Olga Sinclair.
Claudia Correa, de la Fundación Olga Sinclair, resaltó la importancia de conversar y sensibilizar a la comunidad sobre la expresión de las emociones a través del arte. “ENA nos pidió que los acompañáramos en esta actividad, que consideramos de mucho interés y esperamos que podamos seguir replicando estos espacios de la ciudad”, señaló.
“Es la primera de otras actividades artísticas y de participación ciudadana que estaremos promoviendo desde ENA para vincularnos con la comunidad y permitir espacios que tengan sentido de pertenencia y que sean cuidados por los ciudadanos” comentó Roma Altuna, colaboradora de Recursos Humanos de ENA, agregando que en el marco de su programa de Responsabilidad Social Empresarial, la empresa seguirá propiciando espacios de participación sana con las comunidades aledañas a los corredores viales de la ciudad.
Los vecinos agradecieron este tipo de iniciativas. “Actividades culturales, artísticas y de participación son muy bien recibidas por parte de las personas, porque permiten ofrecerles a los niños y jóvenes otras alternativas de expresión”, comentó Adabelis Jurado, habitante de las Palmitas.
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