Panamá ya tiene su primer primer bar especializado en sake, whisky y champagne japonés

 

La nueva joya gastronómica de Panamá no se encuentra en el centro de negocios de Costa del Este o en el turístico Casco Viejo. Este nuevo rincón de apenas 60mts2, está a 40mts

de altura y no tiene letreros ni anuncios rimbombantes… Es más, si no sabes que esta allí, probablemente nunca lo descubrirías.

 

Yokocho se localiza en el corazón del area bancaria de Obarrio, vecino discreto de Makoto y escondido tras el perfecto camuflaje de una gran puerta metálica, que al abrirse desnuda una sala de máquinas donde la mayoría diría “ups!, me equivoque de puerta".

 

Pero tras atravesar esta extraña escena, un golpe de magia y color va directo a los sentidos como si se abriera un portal al mundo de Narnia: Ante los ojos se revela un imponente cerezo florecido —Sakura en japonés—o Cherry Blossom, mismo que pareciera irradiar luz propia, dentro de una cúpula de vidrio finamente decorada, minimalista y precisa, para que la atención se centre en la espectacular escena y las panorámicas vista de Ciudad de Panamá.

 

Yokocho es el primer bar en Panamá especializado en sake, whisky y champagne japonés, donde además de tragos y cocteles elaborados con licores y destilados japoneses, se ofrece un menú basado en la tendencia Izakaya (comida para beber), obra del afamado Chef Makoto Okuwa. Yokocho literalmente significa “callejones de la calle principal”, que incluyen infinidades de pequeños bares que se encuentran en estas calles estrechas de Tokio, y a los tokiotas les encantan los “yokocho” y saltar de un bar a otro.

 

De la carta resaltan el zuke maguro y el kushi katsuo, que resultan una experiencia sorprendente, platos que maridan muy bien con un buen Kimoto (sake). Entre sus cocteles destacan el sakura con bourbon, yuzu y vainilla; el nikitta manhattan, con whisky japonés, umeshu y vermiouth; el hakata, con vodka, sake, midori y syrop de coco; el espresso martini, con vodka, khalua, café y vainilla y el champagne colada, con ron, coco, piña y cava.

 

Un ambiente íntimo, ideal para sorprender.