La actitud 'INPower' de Irene Núñez para enfrentar la crisis del coronavirus

Sáb, 05/16/2020 - 09:00
A la ex Señorita Panamá Irene Núñez la cuarentena la tomó recién casada. Este tiempo de confinamiento junto a su esposo Javier y su perrita Hella ha sido positivo para la relación.
A la ex Señorita Panamá Irene Núñez la cuarentena la tomó recién casada. Cuando se enteró del primer caso en el país lo primero que pensó fue: “¡Gracias a Dios me casé en enero!”, comenta.
 
Este tiempo de confinamiento junto a su esposo Javier y su perrita Hella ha sido positivo para la relación. “Creo que hemos aprendido mucho el uno del otro, hemos tenido diferencias pero algo que tengo que decir es que nuestra comunicación es muy clara y eso facilita las cosas.  Estamos aprendiendo de este reto,  apenas iniciando nuestro matrimonio con amor y paciencia”, afirma.
 
Ella ya se siente más adaptada a la curentena y ha buscado formas de mantenerse entretenida: "Trabajando en mis proyectos, grabando mis podcast, escuchando música en mis ratos libres o cocinando.  Aburrida no he estado porque cosas que hacer siempre hay. Y es que, precisamente cocinar ha sido el pasatiempo favorito de Irene este tiempo porque era un pendiente en su vida. "Estudié un año de cocina y no lo había puesto en práctica", revela.

Lo anterior le ha servido mucho para cuidar su salud emocional, en lo cual viene trabajando hace años. "El hecho de trabajar en crecimiento personal, dar charlas de liderazgo y motivación, trabajar con mujeres en mis asesorías de imagen y talleres, me ha enseñado que debo fortalecerme y conocerme primero antes de intentar ayudar a otros.  Por esa razón he podido encontrar salidas para mis momentos de turbulencia emocional.  Hago ejercicios, medito, cocino ( que es terapia para mí) y me he vuelto muy productiva y creativa con esta pausa".  También tiene entrenamiento de bailarina de ballet y concursos de belleza lo cual le facilita mucho las cosas.
 
"He vuelto a esos tiempos de disciplina, creo que ha sido mi método por decirlo de alguna forma.  Como la mente es tan poderosa, la trabajo a mi favor cada día y mi esposo también ha sido un gran apoyo en mi bienestar y balance diario".
 
 
 
A Núñez, quien es emprendedora ( ‘speaker’ de liderazgo y asesora de imagen), el nuevo coronavirus le ha causado mucho estrés e incertidumbre, “más que todo por los cambios y decisiones que hay que tomar... Han sido muchos sentimientos la verdad, una montaña rusa como lo digo en mis redes.  Esto ha cambiado muchas cosas en mi vida y en la de todos”, dice.
 
Y como Irene precisamente busca fortalecer el poder personal de la gente a través de lo que ella llama #INpower, subraya que una enseñanza desde esta filosofía es “encontrar dentro de nosotros la fuerza para volvernos más creativos, más positivos, pacientes”.  Ese poder, afirma, lo tenemos todos. “Y lo mejor, no es un superpoder, es simplemente ese empuje que nos impulsará a salir de esto”. 
 
Y exhorta: “Aunque lo que realmente quieres es dormir y llorar hasta que todo termine, mira más allá.  Es un tiempo para ajustes internos.  Creo que no podemos dar lo que no tenemos; no hablo solo de dinero, bienes ni nada de eso, sino de valores, amor propio, tiempo. No juzgar, ni quejarse más. Y buscar oportunidades donde solo ves problemas, siempre hay una forma, así como mirar el vaso medio lleno. ¡Ese es tu INpower!”.
 
De esta crisis, asegura, ha aprendido epecialmente a cultivar la paciencia. "La enseñanza principal es la paciencia, porque he tenido que dejar de hablar de ella y ponerla en practica al 100%, Confieso que no ha sido fácil, pero ahí voy". También dice haberse vuelto más compasiva. Cree que las personas deben aprender "a observar alrededor y no solo mirar, a bajar la velocidad de nuestras vidas y ser más analíticos en lo que afecta cada uno de nuestros pasos.  Que veamos más allá de un virus para tomar acciones distintas y más conscientes al salir de él".
 
Cuando acabe la cuarentena, lo primero que la belleza panameña hará es ir a buscar a sus papás y hermana para llevarlos a comer a algún sitio y contar todas las historias de este tiempo de confinamiento. “Seguro habrán muchas”, concluye Nuñez.
 
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