Mar, 10/27/2020 - 08:00
- Deportes
Trabajar en equipo ha ayudado a las Pink Warriors a superar y afrontar esta enfermedad.

“Si quieres ir rápido camina solo, si quieres llegar lejos ve acompañado”, reza un proverbio africano. Y precisamente esto es lo que aplica un grupo de mujeres que permanece unidas, para no permitir que los malos pensamientos o bajones emocionales que pueden llegar después de sobrevivir al cáncer de mama saboteen su avance.
Ellas son las Pink Warriors, un grupo de mujeres que hoy en día han encontrado una especie de terapia en las competencias de bote dragón.
Floribeth de Finizio, sobreviviente de este tipo de cáncer y capitana del equipo, comenta, desde su experiencia: “el bote dragón es un deporte que ayuda mucho para el tema de la rehabilitación, del drenaje linfático. En su mayoría nuestras integrantes han sido operadas de los ganglios axilares para poder evitar así un linfedema; igual el ejercicio que se hace nos ayuda en todos los temas de salud".
Además, destaca que practicar este deporte ha sido positivo para sus vidas, y que sin querer se han convertido en ejemplos de motivación para personas que padecen la enfermedad ya que están en tratamiento y gozan de una salud sin condiciones.
Soporte en pandemia
En tiempos de COVID-19, las Pink Warriors han creado un grupo de soporte para mujeres que están lidiando con el cáncer de mamá o acaban de vencerlo, en cual expertos de la salud brindan información sobre el tema.
“Tenemos un grupo de soporte con 23 personas. Algunas están pasando en estos momentos por quimioterapia, otras ya terminaron sus tratamientos, entonces lo que hacemos en este grupo es que brindamos ayuda, damos ánimos, motivamos y hablamos entre nosotras, comentamos nuestras experiencias”, dice.
Además, destaca que hacen conversatorios con oncólogos y sexólogos. “La idea de nosotros es que las personas estén informadas, puedan preguntar porque a veces no quieren ir a las consultas debido al miedo, y esta es nueva manera de ayudar”, menciona.
Programas testimoniales
En este mes de lucha contra el cáncer de mama, de Finizio resalta que como grupo deportivo y de ayuda, quieren destacar más testimonios de vida para que otras personas sepan que hay mucha vida de calidad después del cáncer.
“No todo termina tras un diagnóstico de cáncer, más bien nos ayuda a renacer como personas nuevas y mejoradas”, cierra.