Cuando hacer el amor duele

Lun, 08/24/2015 - 16:33
Miles de jóvenes de todo el mundo sufren del trastorno llamado vaginismo, el cual impide la penetración, ya que les es muy dolorosa.

Aunque no es un problema matemático, aquí el común denominador es el dolor y el miedo. Y es que aunque muchas mujeres creen que con el tiempo lograrán resolver el problema, no es así. Es más, en muchos casos la situación ha empeorado; y es que si hay dolor, a nadie le apetece tener sexo, no es nada agradable pasar semejante trago.

La relación entre Martha y  Javier se complicó, todo iba mal a tal punto que se separaron… Ella asegura que el motivo de la separación no fue el sexo, pues según explicó, ante la imposibilidad de disfrutar de una penetración por los intentos tan dolorosos, surgieron otras formas de estar juntos de manera sexual, en las que los dos estaban satisfechos; sin embargo, esta chica de 30 años no podía olvidarse de que algo faltaba en la intimidad…

Por miedo, pena y quién sabe qué otras tantas razones, Martha no sabía a dónde recurrir ni cómo preguntar. Pero un buen día descubrió que no es la única con este problema y que en algunos casos es manejable. Al igual que esta chica, muchas mujeres —en casi todo el mundo— padecen de un problema o enfermedad llamada vaginismo. Según el ginecólogo Rubén Darío Mora, se trata de una “rigidez” o espasmo en la musculatura o mucosa vaginal, lo que impide la penetración a la hora de tener relaciones sexuales.

  El vaginismo es una condición que afecta entre el 5% y 17% de las mujeres, se puede decir que un 25% de las que asisten a consultas ginecológicas y de sexualidad es por este motivo.

 La psicoterapeuta y profesora Alma Aldana explicó que hay muchas mujeres que no conocen su área íntima, “les da miedo tocarse, es más, algunas nunca se la han visto ni con un espejo, y son esos miedos sociales, junto con la violencia callejera o de familia, los que ocasionan este problema. Muchas mujeres y parejas viven esto en silencio”.

 El doctor Mora coincide con la doctora Aldana, en el sentido de que la mayoría de las veces el padecimiento está ligado a un trauma emocional (abuso sexual u otro tipo de patología psíquica). Agregó  que “afortunadamente no es tan común en las panameñas, pues va a depender del motivo causal”, tampoco está ligado a la edad; sin embargo, son más las mujeres jóvenes, que están iniciando  su vida sexual, quienes más lo sufren.

¿Un problema que viene de la niñez?

Según la experta, la raíz del problema podría estar en la educación que la mujer recibe en su niñez, que “en muchos casos es fatal”. Y es que  para Aldana, hay padres que confunden a sus hijas diciéndoles que deben aprender a amar y no a desear, y quien lo hace es calificada como “prostituta”. “Es allí donde se despiertan los miedos y culpas”, aseguró la especialista.

 El problema también está acompañado por ciertos comentarios, como “te va a doler, vas a sangrar, no es nada bonito, es muy feo”. También hay miedo a quedar embarazada o a contraer ciertas infecciones venéreas.

En el libro “Sexo sin dolor”, las autoras Alma Aldana y Mónica Braun explican que muchas mujeres en vez de gozar el sexo lo padecen, ha sido siempre algo muy doloroso. Coinciden en que muchas mujeres que sufren vaginismo “no tienen ni idea de que su situación no es normal”.

La experta aclaró que el vaginismo por causas biológicas es menos frecuente, la mayoría son casos ocasionados por el ambiente social.

En cuanto a los síntomas, el doctor Mora explicó que el principal es el dolor durante el coito por falta de elasticidad. Mencionó que el tratamiento para este padecimiento se maneja con ansiolíticos, antidepresivos y localmente se ha intentado utilizar hasta botox, pero hasta el momento no se puede precisar el beneficio real que este ofrezca.

Lo peor de todo es que, según dijo el ginecólogo es muy difícil que una mujer con este padecimiento pueda disfrutar de una vida sexual. “Solo quizás después de psicoterapia o manejo  medicamentoso específico”, concluyó.

 

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