Dama en la calle y loba en la cama

Jue, 01/02/2020 - 11:22
Una postura que te permitirá tener control en el sexo y enloquecerlo. ¡Mira de cuál se trata!
Ilustración: Healthline

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Una mujer ardiente en  la cama no tiene nada que ver con la que se viste de forma erótica y que tiene el cuerpo 'perfecto'. Hay féminas muy sencillas que dan sorpresas en la cama al momento del acto sexual.

Siempre se habla de que hay que crear el escenario necesario para entrar en ambiente antes del acto sexual,  pero a veces no hay tiempo para tanto protocolo, solo estar dispuesta a empezar el show sin tanto escenario. A algunos hombres, por su naturaleza animal, les encanta que la mujer sea más salvaje y que salga de la rutina glamurosa o de la comodidad. Eso sí, siempre debemos estar listas con un buen lubricante, y si el encuentro es ocasional, tener a mano el preservativo. ¡Recuerda que el sexo seguro no es aburrido!

Tener dominio sobre el hombre nos hace vernos devoradoras, para ellos resulta buenísimo cuando la mujer está encima, porque con esta postura —contrario a la del misionero— tenemos las riendas del acto sexual. Con ella la mujer controla la profundidad, el ángulo y el ritmo de la penetración, lo cual es ideal cuando el hombre tiene el pene grande, para evitar incomodidades.

Una sugerencia muy práctica en esta postura es que debes ir lentamente y hacer movimientos suaves contrayendo los músculos vaginales desde la cabeza del pene, llevarlo hasta la base y luego soltar con respiraciones profundas. No es recomendable sentarse encima de tu pareja por mucho tiempo aunque nos guste rosar el clítoris para sentir doble placer. Te aconsejo que te sientes encima, luego continúes con besos apasionados, le tomes sus mano para acariciar tu cuerpo, pedirle que te bese los senos y reclinarte hacia atrás para lograr uno de los mejores ángulos de estimulación del punto 'G',  que para nosotras es muy placentero. 

Esta postura encima del hombre tiene algunas variantes excitantes que pueden realizarse estando sentados, en cuclillas o acostada, dependiendo de la flexibilidad, fuerza, vigor y gusto de la pareja. 

Variante 1

Acerca tu cara a la suya y sostente sobre tus brazos mientras mantienes tus piernas rectas sobre las suyas, vas a quedar completamente acostada sobre él y es donde el erotismo toma poder jugando con el sentido visual. Si tienes el cabello largo, juegas y te haces ver seductora frente a él; además, los besos se hacen muy intensos. Esta posición genera una fricción genial que potenciará su erección y ayudará a mantenerla firme; de igual forma, potenciará muchísimo la estimulación del clítoris.

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Variante 2

Coloca tu cuerpo sobre el suyo, mirando hacia sus pies. Una vez que te haya penetrando puedes inclinarte hacia el frente, estabilizándote con tu manos o agarrando los tobillos de é, de manera que varíes el ángulo de la penetración. Cuando la mujer está de espalda, el hombre puede jugar acariciándole las nalgas y el ano, introduciendo uno o dos dedos o un juguete sexual (como bolas anales o un plug anal) con un buen lubricante anal. Esta posición tiene una característica que de por sí tuerce un poco la dirección natural del pene.

Variante 3

Otra variante es reclinarte hacia atrás para que tu espalda quede contra su pecho y se vuelvan accesibles tus senos, vientre y clítoris, pudiendo él masturbarte o utilizar una balita vibradora para esa área con tantas terminaciones placenteras. Por estar dirigida hacia sus pies, se abre la posibilidad de que muy cómodamente puedas brindarle placer a él acariciando su testículos y perineo.

Si deseas seguir descubriendo otras áreas de estimulación durante el acto sexual, puedes bajar la tensión sexual con las posturas de ladito o con la tradicional cucharita donde este tipo de penetración puedes cambiarla a tu antojo. También es muy buena para los penes largos, que ocasionan alguna incomodidad o dolor al penetrar muy profundamente.

Variante 4

La llamada posición del perrito es una de las populares entre las parejas liberadas sexualmente resultando excitante y efectiva para ambos, porque tanto él como tú pueden perderse en las fantasías. Este juego de poderes resulta sumamente erótico para muchas parejas, pero existen algunas mujeres que sienten incomodidad y dolor con la penetración, en este caso coloca dos almohadas para que la pelvis suba sin incomodarte y experimentes placer al momento de la penetración.

Es importante mencionar que en esta postura el hombre no puede pensar que está en una carrera de caballos o que la mujer es una máquina sexual, es el momento donde el sentido auditivo juega un papel importante ya que él puede decir palabras sucias o subidas de tono, escuchar tus gemidos y la respiración de ambos que va acelerándose, puede besar tu cuello, acariciar tus orejas con su boca o directamente besar tus labios.

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Variante 5

La misma postura del perrito tiene dos variantes adicionales, una de ellas es colocarte en el borde de cama, de rodillas, y que él quede parado. Es una penetración donde la pelvis vuelve a jugar un papel importante, sobre todo si el hombre tiene el pene grande. Trata de inclinarte y levantar la pelvis lo más que puedas para que la penetración vaya directamente al punto 'G', con esta posición el hombre naturalmente se moverá inclinando sus rodillas e irá hacia arriba buscando ese punto con mucha concentración. En esta postura no puedes moverte como la licuadora, ellos llevan el control y cada hombre tienen bombeos diferentes, lo importante aquí es que controles tus movimientos con tus músculos pélvicos, concentrarte en la penetración con respiraciones profundas contrayendo ese músculo maravilloso. No debes hacerlo para acelerar la eyaculación de él, sino para potenciar tus orgasmos. 

Otra variante del perrito es quedar pecho en tierra, completamente arqueada con la pelvis lo más elevada, tus manos y brazos con si estuvieras haciendo pechadas cerradas o prácticamente tu cara debe estar rosando la cama, pero la elegancia ante todo. Sube la cabeza como toda una potra. Esta postura te ayudará a llevar un mejor manejo con el hombre, dándole a entender que su tamaño se perdió en tu vagina porque el pene se tuerce por la misma posición de la pelvis.

Las variantes de esta postura sexual del perrito tienen mucha importancia en el acto sexual debido a que puedes hacer otras posiciones aferrándote a un mueble de la casa, silla de comedor, en el sofá, en el borde la mesa del comedor, encima de la lavadora... la pelvis queda siendo la herramienta necesaria para tener el acto sexual más variado y excitante. 

¡Intenta estas variantes divertidas y versátiles y cuéntame cómo te va!

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