Un movimiento para visibilizar a los afrodescendientes sexo diversos en el país

La discriminación es un problema mundial, especialmente  cuando se trata de  minorías como los grupos afrodescendientes y la comunidad LGBTIQ+. Para hacer frente a esta problemática, en el país nació el MOVIMIENTO AFRO DIVERSO DE PANAMÁ (MOADP), una iniciativa que busca visibilizar las necesidades e intereses de las y los afrodescendientes sexo diversos en el país.

"Este movimiento surge en medio de la Pandemia por el COVID-19, que agudiza y pone a la luz los mecanismos de exclusión y discriminación social que han sufrido las poblaciones afrodescendientes en las Américas; y la invisibilidad de los efectos estructurales de esta discriminación en los negros y negras LGBTIQ+", señaló  Edgar Murdock, vocero.

El objetivo es incentivar la investigación de las realidades de la población afrodiversa en Panamá, como herramienta para el diseño de procesos de sensibilización para el cambio social y la justificación de políticas públicas que contribuyan al desarrollo de esta población tradicionalmente vulnerada.
 

Para Murdock, en el modelo social latinoamericano se ha normalizado el racismo estructural, la desigualdad y la discriminación histórica de la cual la población afrodescendiente es una de sus principales víctimas.  "Sin embargo, desde un enfoque interseccional, si agregamos las variables de la orientación sexual y la identidad/expresión de género la situación se agudiza".

La exclusión de las personas afro de las disidencias sexuales se ejerce en el país, según Murdock "desde las propias organizaciones afro heteronormadas, por un lado, y desde las organizaciones tradicionales de la población LGBTIQ+, por el otro que asumen su representativa desde imágenes acordes al patrón blanco dominante".

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En este contexto, opina, "la organización desde esta conciencia se hace indispensable en un entorno que invisibiliza las realidades racializadas de doble, triple y múltiples segregaciones: por negro/a, sexodiverso, sin recursos económicos y/o bajo nivel educativo".

El reto principal del movimiento es "visibilizar situaciones como los obstáculos para acceder a servicios de salud y educación de calidad, el menor acceso a redes de seguridad social, la desconfianza social generada por siglos de racismo y homofobia, la alta informalidad o trabajos indignantes".

En el informe sobre la situación de los derechos de las personas LGBTIQ+ de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (2015), se advierte con preocupación la afectación de expresiones prejuiciosas hacia personas LGBTIQ+ en la región motivadas por la pertenencia étnica y racial de las víctimas; además de la ausencia de acciones gubernamentales para la garantía de sus derechos.

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